Desde la antigüedad elaboraba de modo tradicional con leche de oveja, por los pastores de la Comarca castellana de Tierra de Campos, se hacía madurar en “bodega” durante largo tiempo para ser transportado por los carreteros maragatos a todos los confines del reino, en especial a la zona centro y a Madrid como punto principal de recepción. Se le conocía también como queso de encella o angilla, debido al molde de mimbre de forma cilíndrica y diámetro decreciente que los artesanos empleaban en su elaboración, si bien su denominación más frecuente en la comarca era la de pata de mulo. Originario de Tierra de Campos, se elabora en diversas queserías de León, Zamora y Valladolid. En un queso de invierno hasta finales de primavera. Se moldean a mano con una tela o gasa haciéndolos rodar sobre una mesa, hasta obtener su forma tubular.